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CÓMO CONSEGUIR QUE SE OIGA MEJOR NUESTRO BAJO EN DIRECTO Parte de la información ha sido extraída de la Web barefacedbass.com Lo que estamos buscando es conseguir la mejor escucha de nuestro bajo sobre el escenario y fuera de él. Primero un poco de teoría. Comprendiendo cómo se transmite el sonidoLa forma en la que se transmite el sonido depende de dos parámetros fundamentales, por un lado la longitud de la onda y por otro el tamaño de la fuente. Un emisor de sonido ideal, infinitamente pequeño, emite el rango completo de frecuencias de forma omnidireccional (hacia todos lados por igual) debido a que el tamaño del emisor es muy pequeño comparado con la longitud de onda del sonido. Sin embargo, un altavoz de diámetro infinito produce una emisión muy direccional y estrecha, porque el tamaño del emisor es muy grande comparado con la longitud de onda del sonido emitido. Por eso, si nos fijamos en el sonido de un altavoz típico montado en una columna, encontramos que las frecuencias bajas (los graves) se transmiten en todas direcciones, lo que quiere decir que si te pones a una cierta distancia por detrás del bafle, escucharás la misma cantidad de graves que si te pones a la misma distancia por delante. Sin embargo, en el rango de frecuencias medias (lo que llamamos definición), la salida se produce exclusivamente hacia delante. Los medios graves con una dispersión de apenas unos 90º hacia cada lado y los medios agudos (el brillo) siendo proyectados en un cono cada vez más estrecho conforme la frecuencia es más alta (y por consiguiente la longitud de onda es menor). Es decir, si quieres escuchar tu bajo definido y entender correctamente lo que tocas, tienes que orientar las columnas hacia tus oídos. Una buena manera de conseguirlo es elevarlas o inclinarlas, (o simplemente alejarte al menos un par de metros de las mismas) y apuntarlas hacia ti. Además de lo anterior, tenemos que contar siempre con que parte del sonido será reflejado por el suelo y las paredes, consiguiendo, sobre todo en el caso de las frecuencias graves un efecto de “acoplamiento” que nos afecta de diferentes maneras. Existen dos tipos de acoplamiento, mecánico y acústico. Acoplamiento mecánicoEl acoplamiento mecánico se produce cuando el escenario/suelo es excitado por las vibraciones de nuestras columnas/monitores o del equipo de P.A. convirtiéndose en una superficie resonante parecida a la del parche de un tambor gigante o al cono de un altavoz. Esto ocurre principalmente en los escenarios de madera huecos. La respuesta acústica de esta superficie resonante es muy impredecible, dependiendo de los modos de resonancia de la misma. Esto produce, en la mayoría de las ocasiones, un sonido de “bola” (sin definición) sobre el escenario y un resultado impredecible sobre el sonido externo (dependiendo de cómo refuerce o cancele las frecuencias). Debemos de intentar evitar el acoplamiento mecánico, y esto se puede conseguir reduciendo la superficie física de contacto entre las columnas y el escenario. Bien poniendo algún material reductor de vibraciones entre ellos (goma/espuma, dispositivos antivibración, etc.), o bien elevando/inclinando las columnas sobre algún tipo de soporte. Otra opción es situarlas sobre una parte más sólida del escenario (por ejemplo una esquina). Si el escenario es muy pequeño, intenta poner las columnas fuera del mismo. También es muy importante no poner los subgraves de P.A. sobre el escenario, aunque, en teoría, cualquier técnico de sonido competente sabrá que no se debe hacer. Sobre escenarios sólidos que no estén huecos, cemento, hormigón, etc. es decir, de materiales en los que no se produzca vibración, se pueden poner las columnas directamente sobre el suelo (no hace falta ningún tipo de aislante). Sin embargo, sobre escenarios huecos, especialmente de madera, es necesario conseguir el desacople mecánico. Esto se puede lograr mediante ruedas, soportes especiales, cajas de cerveza, etc. Acoplamiento acústicoEl acoplamiento acústico, se produce cuando las ondas directas de las columnas y las reflejadas por el suelo y paredes se suman produciendo un perceptible aumento de volumen en las mismas. Como hemos comentado antes, las ondas de baja frecuencia (los graves) son omnidireccionales, lo que significa que los altavoces están proyectando bajas frecuencias hacia todos lados. La mejor manera de visualizar esto es imaginando una especie de esfera de energía que se expande desde la fuente emisora de sonido. Si sitúas la columna sobre un escenario sólido (por ejemplo el suelo), entonces la mitad inferior de esta esfera se refleja sobre la superficie, combinándose con la mitad superior, e incrementando el volumen de tus frecuencias graves en unos ~6 db., lo que equivale a pasar de tener una amplificación de unos 100 w. a unos 400 w. en las frecuencias graves. Esta clase de acoplamiento puede llegar a ser bastante beneficioso a efectos de incrementar el volumen. Entonces ¿Qué pasa si pones tu columna sobre una caja de cerveza para evitar “la bola” y oírte mejor?¿quiere esto decir que pierdes esos ~6 db. de volumen “regalado”? Por suerte, la respuesta es no. Lo que ocurre es que la frecuencia de esta amplificación extra disminuye, es decir, en vez de tener un refuerzo sobre los 250 Hz. ahora lo tienes sobre los 100 Hz. Refuerzo por rebotes producidos en otras superficies rígidasAdemás del rebote que se produce sobre el escenario, hay otros que también debes tener en cuenta, principalmente los que ocurren en la pared que está detrás del escenario y en las que están a los lados. Si son paredes sólidas, no particiones de plástico, tela u otro material ligero, serán reflectores para las bajas frecuencias. Así que, volviendo a la imagen de la esfera de energía irradiando desde la columna, cuando acercamos el amplificador a la pared trasera, la semiesfera (recuerda el rebote sobre el suelo) pasa a ser un cuarto de esfera, consiguiendo de nuevo, una ganancia extra de unos ~3 db. en las frecuencias bajas. Si además situamos la columna cerca de la esquina del recinto, el cuarto de esfera radiante se convierte en un octavo de esfera, consiguiendo de nuevo otros ~3 db. de ganancia en los graves. De la misma manera que cuando elevamos una columna del suelo, la frecuencia de la ganancia, baja (se hace más grave), cuando alejamos la columna de la pared, ocurre el mismo efecto. Esto nos da una buena manera de poder controlar acústicamente el sonido de las bajas frecuencias de nuestra columna sin usar la ecualización. Cancelación del sonido por rebotes producidos en otras superficiesA veces, sin embargo, los rebotes producidos en las superficies rígidas circundantes lo que hacen es cancelar parte de tu sonido. De nuevo, esto ocurre como resultado de que las ondas directas y las reflejadas están colisionando. Cuando dichas ondas tienen la misma fase, se suman, produciendo un aumento de volumen, pero cuando están en oposición de fase, se anulan, disminuyendo el sonido. De nuevo, subir el volumen del amplificador, no sirve de nada. Así que ¿cómo sabemos cuando vamos a tener refuerzo o cuando vamos a tener cancelación? Bien, todo es cuestión de la distancia entre el emisor (la columna) y el reflector (la pared) y la longitud de onda del sonido. Lo mejor, si hay problemas, es desplazar la columna hasta conseguir el efecto deseado.
Cuando tenemos dos emisores de frecuencias graves relativamente cercanos (por ejemplo la columna de P.A. y la de nuestro bajo, o dos columnas de bajo separadas horizontalmente una cierta distancia), se produce un fenómeno conocido como “interferencias de fase”, que consiste básicamente en que el choque de las ondas consigue atenuar o anular el sonido en determinadas zonas, haciendo que en algunas partes del escenario o del local no se oiga prácticamente el bajo, y en otras atruene (se sumen las amplitudes). Fenómeno que aumenta conforme subimos el volumen. Según las leyes de la física acústica, la manera más correcta de evitar estos problemas de interferencias de fase es poniendo los emisores (altavoces) lo más juntos posibles. La mejor opción es poner las columnas apiladas una encima de la otra, intentando que los altavoces se alineen verticalmente (como propone TC Electronic). Si es posible, lo mejor es que sean columnas exactamente iguales. Es importante que tengamos algún altavoz cercano a la altura de los oídos o dirigido hacia ellos. Además, es necesario situarse al menos a dos metros de las columnas para poder escuchar correctamente el sonido. Si el sonido de tu amplificador es parte importante o la totalidad del sonido que escucha el público, no hay otra opción más que ponerlo mirando hacia delante (recuerda no estar demasiado pegado o no oirás casi nada), pero si tu amplificador actúa solo como monitor tuyo y de tu banda, una buena opción es situarlo en un lateral, tipo sidefield. De esa manera, tú y tu grupo tendréis una buena escucha del bajo y además interferirá poco con el sonido de la P.A. Desde luego, lo mejor es disponer de un inalámbrico y pasear por el recinto mientras estás tocando para escuchar como se oye. También es interesante saber cómo se oye el bajo en el resto del escenario, donde están situados tus compañeros de banda. Lo normal, es que, a efectos de claridad, el sonido en el escenario deba tener más medios y agudos que el que sale por el equipo de P.A.
Punch Micro de bombo Micro de voz Distancia Sonido con o sin banda Mitos Diferencia (muy grande) entre escenarios sólidos (suelo) o huecos, especialmente de madera (boomy). Resumen
Si estamos sonorizados por P.A. (columnas usadas como monitor)
Si NO estamos sonorizados por P.A.
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